
Artemisia Gentileschi, la pintora más famosa del Barroco. ¿Por qué es tan famosa hoy en día?
Artemisia Gentileschi nació en Roma el 8 de julio de 1593. Hija del conocido pintor Orazio Gentileschi, está considerada la figura femenina más importante del Barroco, no sólo en Italia, sino también en la historia del arte occidental. El Barroco es un estilo artístico que se distingue por la ornamentación. Artemisia se distinguió por la ejecución de escenas históricas y religiosas a gran escala. Y no sólo eso, consiguió imponerse en una época dominada predominantemente por los hombres en el mundo del arte.
Artemisia perdió a su madre muy joven. Por ello, creció en estrecha relación con su padre Orazio, quien le enseñó a pintar entre las paredes del hogar, sin frecuentar lugares públicos.
Artemisia se casó con un artista florentino llamado Pietro Antonio, por lo que se trasladó a Florencia. El traslado resultó ser una oportunidad que la ayudó a florecer como pintora. Recibió el apoyo de Cosme de Médicis, el gran duque de Toscana. Más tarde, también recibió encargos del rey Felipe IV de España.
Artemisia se trasladó a varias ciudades italianas para ejecutar pinturas para la nobleza y la iglesia. Los temas a menudo hacían referencia a historias bíblicas o mitológicas. Sus interpretaciones de temas tradicionales son únicas y originales, y expresan un realismo dramático. Seguidora de Caravaggio, el claroscuro utilizado es bastante evidente. Artemisia también se trasladó a Inglaterra con su padre Orazio para realizar obras encargadas por la reina Henrietta Maria, esposa del rey Carlos I. Gentileschi murió en Nápoles en 1652.
